MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Relaciones Interiores, Justicia y Paz de Venezuela ha emitido un comunicado este martes negando las afirmaciones pronunciadas, entre otros, por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) y el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, que acusan al Gobierno de haber lanzado bombas lacrimógenas desde helicópteros durante las protestas en la capital.
En una serie de mensajes publicados a través de su cuenta oficial en la red social Twitter, el Ministerio de Interior ha acusado a algunos "voceros de la MUD" que difundieron "información" que luego fue recogida por varios medios de comunicación sobre un "helicóptero de la Policía Nacional Bolivariana (PNB)" desde el que "supuestamente" se lanzaron bombas lacrimógenas.
"Este falso positivo se sustenta en un vídeo donde se observa el paso del helicóptero y coincide con el lanzamiento de bombas lacrimógenas, tratando de hacer ver que fue desde el helicóptero, sin mostrar la trayectoria real del objeto que confirme ese señalamiento", ha indicado el Ministerio.
Interior ha subrayado que la "función de la tripulación del helicóptero de la PNB y de los equipos de operaciones aéreas es netamente informativa y de monitoreo para visualizar azoteas y evitar que atenten contra personas en manifestaciones" y "ampliar el campo visual para fortalecer cobertura territorial en sintonía con los estándares y protocolos internacionales de aviación".
Asimismo, ha afirmado que según la legislación venezolana, está "prohibido arrojar objetos" desde cualquier helicóptero, recalcando que la trayectoria de caída de los proyectiles no corresponde con la que se habría registrado si estos hubieran sido lanzados efectivamente desde el aparato.
"Es inviable que el helicóptero de la PNB haya sido desde donde se lanzaron las bombas lacrimógenas que se ven caer en el vídeo. De ser así, hubiesen caído en otro lugar por distancia oblicua, velocidad y dirección de desplazamiento de aeronave. ¡Física elemental!", ha agregado.
Asimismo, ha reiterado que el "objetivo" del helicóptero es la inspección, desde el aire, de las manifestaciones para que estas se desarrollen "de manera pacífica".
"Lo que vimos en el día de ayer no es más que el producto de grupos de desinformación y desestabilización cuyo objetivo no es otro que montar un globo de ensayo de nuevos falsos positivos para engrosar el expediente internacional que justifique una intervención militar en Venezuela. Como ya lo hicieron con la miserable 'denuncia' del supuesto uso de armas químicas", ha criticado, en referencia al ataque con misiles de crucero del viernes contra una base militar en Siria por parte de Estados Unidos.
Por último, el Ministerio de Interior ha garantizado que "jamás" se prestaría a "validar o refrendar conductas impropias de abuso o exceso policial que no se corresponden con la doctrina de actuación del nuevo modelo policial".
"Cada hecho aislado que vaya en contrasentido al espíritu de nuestra PNB o Guardia Nacional Bolivariana (GNB)ha sido oportunamente denunciado y los responsables han sido sancionados disciplinariamente con medidas administrativas y judiciales", ha concluido.
Las declaraciones del Ministerio de Interior responden a las diferentes críticas por parte de la oposición que apuntan al presunto lanzamiento de bombas lacrimógenas en las protestas que se han celebrado en los últimos días en Venezuela. Este lunes, el defensor del Pueblo, Tarek William Saab, advirtió de que el lanzamiento desde altura de objetos contundentes por parte de las fuerzas de seguridad para dispersar manifestaciones podrían ocasionar victimas fatales.
Este mismo martes, Almagro acusó al "régimen" venezolano de haberse sumado el "criminal hábito de lanzar bombas lacrimógenas vencidas, cuya peligrosidad se multiplica" e incluso de haber utilizado un helicóptero para "arrojarlas indiscriminadamente sobre los manifestantes".
"En uno de los episodios más repudiables esta práctica criminal alcanzó un hospital de Caracas, donde pacientes y personal fueron afectados por los gases", ha señalado.
Estas declaraciones se produjeron tras las denuncias con fotografías y vídeos en los que se podía ver a las fuerzas de seguridad arrojando bombas lacrimógenas desde edificios y helicópteros durante las protestas de la oposición contra el presidente.
Según la ONG Foro Penal Venezolano, durante los últimos siete días de protestas un total de 297 personas han sido detenidas en el marco de las manifestaciones, principalmente en Caracas, si bien la mayoría han sido liberados. Según su director, Gonzalo Himiob, sólo 15 personas siguen bajo arresto.