MADRID 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha comenzado ya con las tareas de rehabilitación tras las dos operaciones a las que ha sido sometido esta semana por una hemorragia intracraneal, derivada supuestamente de un accidente doméstico que sufrió a mediados de octubre.
El presidente lleva desde entonces internado en el Hospital Sirio-Libanés de São Paulo.
En la última actualización de su estado de salud, publicada en su cuenta oficial de la red social X, el director clínico Álvaro Sarkis apunta que el mandatario ha pasado a "cuidados semiintensivos", en una evolución favorable.
El presidente, de acuerdo con el último parte de este viernes por la mañana, "se mantiene lúcido y orientado, ha comido con normalidad y camina por los pasillos" del hospital.
El mandatario, de 79 años, se golpeó la cabeza en la bañera de la residencia oficial y, si bien no llegó a perder el conocimiento, requirió cinco puntos de sutura en la parte posterior.
El accidente provocó que cancelara su viaje a Rusia para participar en la cumbre de los BRICS+, aunque en fechas posteriores sí mantuvo su agenda y de hecho viajó la semana pasada a una cumbre de líder del Mercosur en Uruguay.