SAO PAULO, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
Todos los años Brasil celebra una de las fiestas más importantes del calendario brasileño: el Carnaval.
Millones de turistas extranjeros atraídos por los colores, la música y el clima tropical de Brasil se unen a los casi 200 millones de brasileños para celebrar esta fiesta popular, que tiene su origen en la Edad Media.
Esta fiesta de fecha fluctuante cambia de acuerdo con el domingo de Pascua, pues debe ser celebrada 47 días antes del período de la Semana Santa.
En Brasil desde el viernes que anticipa el 'miércoles de cenizas', el país exhibe un verdadero espectáculo de luz, color y, como no puede dejar de ser pasean los deslumbrantes cuerpos de la mulatas por los sambódromos, calles y avenidas.
Para este año Embratur (Instituto Brasileño de Turismo) esperaba uno de los carnavales más importantes de Brasil porque pretendía estimular a los turistas para la inminente Copa del Mundo.
La fiesta más popular de Brasil esperaba atraer 6,6 millones de turistas y acrecentar 6,1 millones de reales (2,6 millones de dólares) a la economía del país, de acuerdo con un comunicado del Ministerio de Turismo.
En 2013, según los datos de la Asociación Brasileña de las Empresas de Servicios Externalizados y Trabajo Temporal, las fiestas de Carnaval generaron 250.000 puestos de trabajo en distintos sectores de la economía, tal como publica Embratur en su web.
Está claro que ningún otro país en el mundo tiene una fiesta tan fascinante. Pero se equivocan los que piensan que Brasil celebra el carnaval de igual manera.
Cada Estado tiene una forma diferente de disfrutar. En Brasil la 'folia' empieza el viernes por la noche y sólo finaliza en el domingo siguiente, casi una semana de pura magia y música.
Sao Paulo y Río de Janeiro son los más parecidos. Las escuelas de samba que pasan todo el año preparándose desfilan sus coches alegóricos y sus disfraces a las miles de personas que compran sus ingresos para bailar al ritmo de la samba.
La parte norte de Brasil, es distinta compuesta por 'blocos' de carnaval, grupos de personas uniformadas con los famosos 'abadás' -que pueden variar de los 130 dólares a los 1.300 dólares para tres días - que siguen a los cantantes que dan ritmo a la fiestas subidos en carros que recorren los diferentes circuitos.
Del norte de Brasil se puede destacar Bahía, que celebra el carnaval casi todo el año.
En Pernambuco y Recife el encantamiento se queda por cuenta de los 'frevos' un ritmo musical y una danza con elementos de la 'capoeira'.
Sin embargo, el carnaval de este año prácticamente se ha acabado este martes aunque el próximo fin de semana en Río de Janeiro y Sao Paulo desfilarán las escuelas elegidas por el jurado.
Es el día del 'Desfile de las Campeonas'. Para los que están en Brasil les toca disfrutar y, para los que no tendrán que esperar hasta febrero del próximo año.