PERÚ, 17 Jan (EUROPA PRESS)
Durante el año pasado, Perú experimentó un incremento significativo en la llegada de visitantes internacionales, superando los 3,2 millones de turistas, lo que representa un crecimiento del 29% en comparación con el año anterior, añadiendo así 732.000 turistas más a su conteo. Este notable aumento refleja también una recuperación del 74,5% respecto a las cifras de turismo que el país ostentaba antes de la pandemia en 2019, según lo reveló el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo.
La mayor parte de estos visitantes provino de diversas naciones, siendo Chile el país con más turistas enviados hacia Perú, al sumar 700.000 visitantes, lo que constituye el 21,5% del total. Le siguen Estados Unidos, con 604.000 turistas (18,6%); Ecuador, con 291.000 visitantes (8,9%); Bolivia, con 189.000 turistas (5,8%); Brasil, con 185.000 personas (5,7%) y Colombia, con 170.000 visitantes (5,2%). En conjunto, estos seis países representaron el 65,7% del total de llegadas al país sudamericano.
Interesantemente, varios de los países emisores lograron superar sus cifras de envío de turistas respecto a los niveles previos a la pandemia, entre ellos Bolivia, con un crecimiento del 0,1%; Costa Rica, con un 15,3% más; Polonia, aumentando un 20,4%; República Dominicana, con un alza del 46,2%; Guatemala, creciendo un 38,4% e India, con un 14,2% de incremento.
Al analizar la procedencia de los turistas por bloques regionales, Sudamérica se mantuvo a la cabeza con el 51,6% del total, equivalente a casi 1,7 millones de visitantes. Por su parte, Norteamérica representó el 24%, sumando unos 783.000 turistas; Europa, un 16,6%, con 540.000 visitantes; y Asia, un 4%, totalizando 129.000 personas que llegaron a Perú desde ese continente.
El Aeropuerto Internacional Jorge Chávez jugó un papel crucial como la principal vía de entrada para los turistas internacionales en Perú, recibiendo más de 2,15 millones de visitantes, lo que se traduce en el 66,2% del total de llegadas. Este flujo de turistas internacionales evidencia la fortaleza y la recuperación del sector turístico peruano en el escenario postpandemia, posicionando al país como un destino preferente para viajeros de diversas partes del mundo.