MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
La aerolínea brasileña Gol registró unas pérdidas netas atribuidas de 2.288 millones de reales brasileños (381 millones de euros) en el primer trimestre del año, debido al impacto de las restricciones de vuelos derivadas de la crisis del coronavirus Covid-19, según informó la compañía en un comunicado.
La empresa ha resaltado que, como consecuencia de la pandemia, los resultados del primer trimestre, que iban encaminados a registrar récords hasta mediados de marzo, se deterioraron rápidamente debido a la situación "sin precedentes" en la industria.
El pasado 16 de marzo, Gol comenzó a reducir su actividad hasta un 60% en el mercado doméstico y hasta un 95% en los vuelos internacionales. La compañía señala que esta decisión se tomó como reflejo de la demanda de los consumidores, así como las acciones similares que otras aerolíneas tomaron.
Pese a las consecuencias de la pandemia, el consejero delegado de Gol, Paulo Kakinoff, ha asegurado que la empresa tiene experiencia "a la hora de navegar en etapas estresantes".
"En este momento ponemos el foco en tres prioridades. Primero, la protección de la salud y la seguridad de nuestros trabajadores y consumidores. Segundo, preservar la liquidez financiera de la compañía para poder superar esta crisis, y tercero, asegurar que estamos bien posicionados para la continuidad de nuestro exitoso modelo de negocio, cuando la actividad vuelva, a través de un plan robusto para retomar la normalidad en las operaciones", ha destacado.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de Gol fue de 1.439 millones de reales (240 millones de euros) entre enero y marzo, un 51,3% más respecto al mismo período del año anterior; mientras que sus ingresos ascendieron hasta los 3.147 millones de reales (524,8 millones de euros), un 2% menos.
La empresa asegura que están realizando una gestión efectiva en la crisis sanitaria y económica, apuntando que su situación financiera actual es sólida. De este modo, Gol ha realizado una revisión "rigurosa" de su presupuesto, con una reducción de aproximadamente 2.400 millones de reales (400 millones de euros) en sus costes y el aplazamiento de varios pagos en 2020.